Queenstown es otro de los lugares que ha cambiado mucho desde mi primera visita en 2002, y como no tengan cuidado los kiwis, le puede pasar lo mismo que a Ushuaia en Tierra de Fuego argentina, que pasó de ser una pequeña localidad con mucho encanto en los confines del mundo, a un lugar con atascos de tráfico, casinos, precios altos y colas para todo por culpa del turismo antártico y de esquí.
En Queenstown viven unas 20.000 personas, lo que en principio no parece mucho, pero me atrevería a decir que cada día la visita una cantidad mayor de gente, en busca de la aventura de su vida, que en Queenstown se ofrece en forma de múltiples actividades lúdicas, algunas sólo aptas para gente con muchas ganas de soltar adrenalina.
En todo caso Queenstown es un lugar bellísimo, gracias a las montañas que lo rodean, como la sierra de los Remarkables, y sobre todo porque se encuentra situada al borde del lago Wakatipu, fontera natural entre las regiones de Otago y Southland. En invierno es uno de los principales destinos de esqui de Nueva Zelanda.
Es el lago más largo de Nueva Zelanda, 80 km y con sus 290 km² de superficie es el tercero en extensión. Aunque está a una altitud de 310 metros, el lago es muy profundo y su fondo está 100 metros por debajo del nivel del mar. Un barco de época, el TSS Earnslaw, con más de 100 años de vida, navega todos los días sus aguas y hacer sonar su vetusta sirena.
Tenía varios días libres entre el tour que había hecho con Hiking New Zealand por la costa oeste, y el nuevo que iba a hacer con ellos a la zona de los fiordos de la isla sur, llamado Secret South (Sur Secreto).
Una de las actividades más adrenalínica es el skydiving, o salto en paracaídas tandem, que ya intenté hacer en mi primera visita a Nueva Zelanda, pero no pudo ser por el mal tiempo, y esta vez pensé que no tendría problema porque pasaba varios días en Queenstown.
Hice la reserva con Nzone, considerada la mejor compañía de skydiving en Nueva Zelanda, y todas las mañanas, a las 9 am, y de nuevo a las 14 pm, me presentaba en su oficina, pero el tiempo estaba malo y día tras día cancelaban. Claramente mi ángel de la guarda no quiere que haga skydiving.
En todo caso no perdí el tiempo, porque otra actividad muy conocida y visitada en Queenstown es el jetboat por el río Shotover con Shotover jet, la compañía con más experiencia, ya que llevan 40 años recorriendo el río a velocidades de hasta 85 km/h, en aguas tan poco profundas como 10 cm, y para acabar de soltar toda la adrenalina, los botes hacen un giro de 360º a toda velocidad.
Los cañones están a unos 15 km de Queenstown y te llevan en autobús desde la calle principal, que se llama Shotover, ¡cómo no!, y mientras te dan el chaleco y las instrucciones de seguridad, puedes ver como otros botes pasan a toda pastilla con las caras de la gente congeladas de ¿frío? ¿extasis? ¿felicidad? ¿emoción? ¿terror?.
El río bajaba turbio y alto por las lluvias de los últimos días, y nos dijeron que por razones de seguridad no superarían los 70 km/h.
El intríngulis no es sólo la velocidad, si no que las lanchas pasan a escasos centímetros de las paredes del cañón, y la sensación combinada de la velocidad, el río, las rocas del cañón y los giros de 360º hacen que nadie sea indiferente a la experiencia.
Las lanchas llevan además dos cámaras, una enfocando al personal, unas 15 personas caben en cada lancha, y la otra al barco por detrás dando los saltos secos sobre el agua del río.
Al final de todo, mientras recuperas la compostura, puedes ver (y comprar, por supuesto) los vídeos del recorrido y las fotos.
Aparte de estas, las actividades de aventura más populares en Queenstown son el rafting, las canoas en aguas bravas, el descenso a tumba abierta en bicis de montaña, y el puenting o bungy jump, reinventado para el mundo occidental por un kiwi que vio en un viaje a Vanuatu, un país del Pacífico Sur, como los jóvenes se ataban lianas a los tobillos y se tiraban desde los árboles para mostrar su hombría quedando sus cabezas a escasos centímetros del suelo (bueno. no siempre).
Otra actividad, mucho más relajada, que también hice, fue el tour de El señor de los anillos a Glenorchy. La trilogía se rodó por toda Nueva Zelanda, pero la zona de Queenstown es de los lugares que incluye más localizaciones en un entorno natural.
La pena fue que el tiempo fue desastroso y casi no pude usar la cámara, ya que el viento y la lluvia fueron incesantes.
Nomad Safaris hace un tour en 4×4, que primero te lleva por el borde del lago Wakatipu con unos paisajes fantásticos hasta Glenorchy, una pequeña localidad al borde del río Dart.
Luego se va por una pista de tierra hasta llegar al lugar donde se ubicaba Isengard, rodeado por el monte Earnslaw, y también vimos la ubicación del Bosque de Lothlórien.
De regreso hacia Queenstown, a unos 20 km., se ve el lugar donde su ubicaba el campamento de Ithilien y se rodó la batalla de los olifantes.
Además de El señor de los anillos, en Glenorchy también se rodaron Xmen Origins: Wolverine, Las Crónicas de Narnia y El Príncipe Caspian.
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Para realizar rutas de senderismo y aventura, recomiendo Hiking New Zealand, una empresa que tiene tours para todos los niveles, desde el senderista aficionado hasta el expedicionario que se pasa una semana mochila al hombro, y tienen aventuras de escalada, bici de montaña, vela, buceo, y hasta viajes a la Antártida.
Para más información sobre Queenstown, consulta las páginas web (en inglés) de:
Wikipedia. Queenstown (español)
Queenstown. Web oficial de Turismo nacional
Queenstown. Web oficial de Turismo regional
Nzone Sky Diving
Shotover Jet
Nomad Safaris. Tour El señor de los anillos
Experience Queenstown
Everything Queenstown
Haz clic para ver:
Fotos de Queenstown, Tour de El señor de los Anillos y Shotover Jet.
Mapa con las fotos geoposicionadas en Flickr Maps y Google Maps.
«Dale al play» en la presentación de abajo para ver todas las fotos de Queenstown.
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Carlos, desde Auckland, Isla Norte, Nueva Zelanda, 25 de mayo de 2010
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