La región de Malborough, al norte de la isla Sur, es conocida sobre todo por tener algunos de los mejores vinos de Nueva Zelanda, y se le llama la región gourmet, ya que tiene varios festivales de comida y vino y más de 40 bodegas que se pueden visitar para comprar, hacer catas de vino o degustaciones varias.
La razón de mi visita era menos dionisiaca o báquica, y obedecía al segundo intento de hacer una ruta de senderismo muy popular en Nueva Zelanda, de 71 kilómetros, el Queen Charlotte Track, ya que la primera vez había desistido por el mal tiempo.
Fue una buena decisión porque en mi segunda visita el tiempo fue perfecto, sin demasiado calor, porque era principios de otoño, abril, y porque había pocos caminantes y sobre todo pocas bicis a pesar de ser Semana Santa, ya que es también muy popular para hacer en mountain bike, .
La caminata es muy popular por varias razones, la principal es que es un camino costero por un sendero bien formado, con una altitud máxima de 450 metros, con unas espectaculares vistas de la recortada costa de Malborough, y es bastante cómodo de hacer, ya que hay alojamiento de todos los niveles en el recorrido, desde camping hasta hoteles de lujo.
El catamarán de Endeavour Express
Además no tienes que llevar la mochila de un punto a otro, ya que los barcos que hacen el transporte de pasajeros, ya que la mayor parte de la ruta no tiene acceso por carretera, llevan las mochilas de un alojamiento al siguiente.
En bici se suele hacer en 2/3 días y caminando en 3/4/5 días. Yo elegí la opción de 4 días para que me permitiera hacer algunas caminatas extra a cascadas y miradores.
Se puede hacer sin guía, y organizar la reserva de alojamientos en la oficina de turismo isite de Picton, donde son super amables y se encargan de todo, incluso el billete de barco.
Haciéndolo por tu cuenta y en alojamientos de mochileros, el barco más el alojamiento por 3 noches puede salir en total en unos 120, y por ese dinero es sin duda una de las mejores opciones de senderismo en Nueva Zelanda.
La aventura comienza con un recorrido de una hora en barco desde Picton hasta Ship Cove, el lugar preferido por el capitán Cook en sus 3 viajes de exploración por Nueva Zelanda.
De Ship Cove a Endeavour inlet
En total pasó 170 días en su bahía entre el primer viaje de 1770 y el último de Febrero de 1777. Cook lo consideraba un puerto seguro, con agua fresca, madera y pescado, además se relacionó intensivamente con la comunidad maorí de la zona.
Hoy es un lugar muy agradable con paneles informativos de la visita de Cook, y un monumento bastante feo dedicado al navegante.
El monumento a Coook
Aunque casi todos los senderistas hacen la ruta en el sentido de Ship Cove a Anakiwa, el kilométrico del sendero está al revés, así que una hora después de comenzar la caminata, que al principio es bastante empinada, vi la señal de 66 km, así que había hecho 5.
Cada 5 kilómetros hay una señal de kilómetrico, aunque es casi imposible perderse. Hay zonas donde pasas por terreno privado, con acceso a casas y fincas agropecuarias, pero están perfectamente indicadas.
El día era perfecto, con unos 20º y además el sendero transcurre casi todo el tiempo por bosque, así que el sol no da directo.
Ship Cove
La etapa entre Ship Cove y Endeavour inlet es de 14 km, y me arrepentí de no haber continuado hasta Punga Cove, unos 12 km más, ya que me alojé en el Furneaux Lodge, un hotel de lujo que tiene una sección para mochileros, pero tan bueno es el hotel como mala es la parte de mochileros, con una camas y colchones horribles y hasta 20 personas compartiendo 2 habitaciones.
La parte agradable es que el hotel está ubicado en una preciosa bahía y la vistas, tanto al atardecer como al amanecer, fueron fabulosas.
La bahía Furneaux Lodge al atardecer
Como el segundo día tenía sólo 12 kilómetros hasta Punga Cove, decidí tomar un sendero hasta una cascada, aunque ya me habían dicho que hacía 10 días que no llovía y que seguramente no tendría agua, pero el sendero era precioso, con árboles de helechos enormes que me hacían pensar en las junglas de Pandora en la película Avatar.
La bahía Furneaux Lodge al atardecer
Cuando llegué a la cascada efectivamente no tenía una sóla gota de agua, sólo la lisa piedra que demostraba que por allí a veces caía una cortina de H2O. Regresé al sendero principal, y me lo tomé con mucha calma, ya que sólo tenía 3 horas de caminata, y me deleité haciendo fotos de las montañas y las bahías, con un color azul turquesa que parecía más caribeño que de Nueva Zelanda, aunque la temperatura del agua no era precisamente cálida.
Helechos gigantes
El Punga Cove Resort es también un hotel de lujo, situado en varios niveles de terrazas de una colina, con acceso en coche en la parte superior, y en barco y caminando por el Queen Charlotte Track por la inferior.
A diferencia del Furneaux lodge, aquí la recepción fue muy amable y aunque llegue antes de la hora de check-in, que en Nueva Zelanda suele ser 2 pm, me dieron la habitación.
Espectaculares vistas desde el sendero
Los mochileros y los empleados comparten las mismas instalaciones, baños y y cocina, y aunque las habitaciones son minúsculas, están muy limpias, sólo hay 2 camas y de calidad, y las vistas son fabulosas.
Lo que es prohibitivo es el restaurante, ya que al menos una de las noches de la caminata pensaba darme un capricho y comer en un buen restaurante, pero el precio no bajaba de 40 para una cena.
Me limité a tomarme una cerveza, que me costó 4, aunque llevaba incluída unas vistas aéreas de la bahía que quitaban la respiración.
El tercer día de caminata, desde Punga Cove a Mistletoe bay, son unos 33 km, de los cuales las 2 primeras horas son de subida continua, ya que en esta parte el sendero se separa de la costa y va justo por la divisoria de la montaña, con vistas a derecha e izquierda sobre el mar, sin duda uno de los paisajes más extraordinarios que he visto en mi vida.
Mapa tercer día
Llegué a Torea Bay a las 14h, y como no había alojamiento por ser fin de semana, tenía que tomar un barco en Mistletoe bay, a 3 horas de Torea, pero el último barco era a las 4 y ya estaba cansado después de 25 km, así que llamé a la empresa, Endeavour Express, y vinieron a buscarme aunque era el único cliente en Torea.
Opino que en general Nueva Zelanda tiene el mejor servicio a clientes del mundo, al menos en el sector turístico.
Vistas desde la divisoria
El barco me dejó media hora después en Anakiwa, final de la caminata, así que al día siguiente tendróia que hacer la ruta hasta Mistletoe Bay, en sentido inverso.
Me alojé en uno de mejores lugares de todos lo que he estado en Nueva Zelanda, Anakiwa Backpackers, donde Tanya y Shayne han creado un mini paraíso en una casa de 1926 que no han parado de renovar desde que decidieron instalarse definitivamente en Nueva Zelanda escapando de la fría Inglaterra.
La recortada costa de Malbourough
La casa, decorada con excelente gusto, tiene una mesa de billar inglés de 1920, un reloj de pared también antiguo, 2 habitaciones dobles en la planta baja, un apartamento completo y una cabina para cuatro en un antiguo cobertizo.
En la parte del terreno colindante con el Queen Charlotte Track, han instalado un café en una antigua camioneta y todos los que terminan la caminata agradecen algo caliente al final.
Mapa cuarto día
El cuarto día fue el único en que el clima no fue perfecto, ya que habían anunciado lluvia y amaneció totalmente nublado.
Como iba al revés que la mayoría de la gente, no hacía más que cruzarme con gente que me había visto caminar en el otro sentido los días anteriores y me preguntaban extrañados si estaba haciendo el camino dos veces, hasta que les aclaraba que tenía que hacerlo así porque no había encontrado alojamiento en Torea/Mistletoe.
¿Vivirá David el gnomo en esta preciosa casita?
Hice los 13 km entre Anakiwa y Mistletoe bay en en 2h30, y comenzó a llover, por lo que decidí desandar el mismo camino, ya que si no tenía que esperar 3 horas el barco, con viento y lluvia, y prefería hacerlo caminando, al menos no me enfriaría.
A las 14h30 estaba de regreso, con la satisfacción de haber completado el Queen Charlotte Track y conocido a gente como Tanya y Shayne, que habían dejado sus trabajos bien remunerados en Londres para cumplir su sueño, y el Universo conspiró para que lo consiguieran.
Anakiwa
Me tomé un café en su camioneta y pensé que Anakiwa, una población con 100 casas y unos 300 habitantes, sin una tienda, ni restaurante ni cobertura de móvil, pero a media hora de Picton por carretera o en barco, era un lugar perfecto para desconectar del mundo real.
El pasatiempo de los paisanos era un concurso a ver quien tenía el buzón más original, y en esto tengo que reconocer que no coincido con los gustos de los kiwis, porque la palabra kitch es insuficiente para describir las cosas que he visto.
Para consultar alojamiento y lugares recomendados en Nueva Zelanda, visita minube, la red social de viajes más activa en español.
Para viajar por Nueva Zelanda, recomiendo Destino NZ, una agencia de Nueva Zelanda regentada por hispanos,
Para realizar las rutas con un toque de «magia», recomiendo el Magic bus, un autobús para viajeros independientes que vende pases válidos durante un año; te puedes bajar y subir las veces que quieras en ruta.
Paran en los lugares más interesantes, te hacen reservas en los hostales más populares, tienen paradas en los alojamientos, por lo que te ahorras tiempo y dinero, y consigues descuentos en actividades como globo, parapente, bungy jump, jetboat, tours de El Señor de los Anillos, etcétera.
Para más información sobre el Queen Charlotte Track, consulta las páginas web (en inglés) de:
Wikipedia Queen Charlotte Sound
Queen Charlotte Track DOC
Turismo Nueva Zelanda Queen Charlotte Track,
Queen Charlotte Track NZ
Queen Charlotte Track Cougar Line y
Wine Trail Network.
Haz clic para ver:
Fotos de Queen Charlotte Track.
Mapa con las fotos geoposicionadas en Flickr Maps y Google Maps.
«Dale al play» en la presentación de abajo para ver todas las fotos del río Pororari.
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¡¡ Hasta Pronto !!
Carlos, desde Auckland, Isla Norte, Nueva Zelanda, 12 de Abril de 2010
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