Cocodrilo Dundee, Mad Max y Priscilla, reina del desierto.
Os preguntareis que tienen en común estas 3 películas, tan diferentes entre sí, y la respuesta es fácil, las 3 están rodadas en Australia, e independientemente de la calidad de las películas, lo que destaca en ellas son los paisajes australianos, desde la exhuberancia de Kakadu y sus cocodrilos de hasta 8 metros de largo, hasta los áridos paisajes del Red Centre que se ven en Mad Max y el espectacular recorrido hasta Alice Springs en el bus Priscilla.
Probablemente os extrañará saber que en Australia también se ruedan muchas películas cuya ubicación teórica es Los Angeles, Chicago, Nueva York o San Francisco, la razón es que es mucho más barato y sencillo para los grandes estudios rodar en Australia. Su extraordinaria variedad paisajística permite rodar desde una película de vaqueros hasta una ambientada en Africa.
Más difícil sería que rodaran una ambientada en el Himalaya (7 días en el Tibet, con Brad Pitt, se rodó en los Andes argentinos), ya que el promedio de altitud es de 210 metros y su cima más alta es el Monte Kosciusko con 2.228 m., que ya he subido.
Australia tiene cerca del 5 % de la superficie total del mundo y está completamente rodeada por agua. Limita al norte y al este con el Océano Pacífico (Mar de Arafura, Mar del Coral y Mar de Tasmania) y al sur y al oeste, con el Océano Indico.
El río más importante es el Murray con numerosos afluentes como el Darling o el Murrumbidgee. Australia cuenta, además, con cerca de 700 lagos entre los que destacan el Torrens, Gairdner y el Lago Eyre, situado a 11 metros por debajo del nivel del mar. Las cascadas son muy habituales en su geografía, asi como las islas y arrecifes que cubren casi toda la costa oriental, especialmente en la Gran Barrera de Coral, la mayor del mundo.
Australia puede dividirse en tres grandes zonas: la Gran Cordillera que se extiende desde la península del Cabo York hasta el Estrecho de Bass, prolongándose hasta la isla de Tasmania.
Esta zona está formada por mesetas cortadas por profundos y hermosos valles, siendo la parte meridional la más elevada; la Zona Central de Australia se caracteriza por sus vastas tierras bajas, que constituyen gran parte de la cuenca del río Murray y del Lago Eyre.
Aquí se encuentran el Gran Desierto de Gibson, el Gran Desierto de Arena y el Gran Desierto Victoria. Finalmente, en la Región del Oeste se extienden una serie de altiplanos con una altitud media de 400 ó 500 m. con amplias zonas desérticas.
Sus playas son sin duda las más hermosas y largas del mundo, hasta 100 km. de largo, y un paraíso para los surfistas; los acantilados de la Great Ocean Road y la costa de Tasmania son espectaculares.
Por otro lado hay que decir que Australia fue el primer país en declarar una zona como Parque Nacional en 1879. El país cuenta con 14 zonas declaradas Patrimonio de la Humanidad UNESCO, la Gran Barrera de Coral, Uluru (Ayers Rock), los Bosques Pluviales de Quensland, la Isla de Fraser, los valles del sudeste de Tasmania, la región de los Lagos Willandra, el Parque nacional Kakadu, las Islas de Lord Howe, la Bahía Shark en Australia occidental, la Isla Fraser en la Costa Este, los Sitios fosilíferos de mamíferos (Riversleigh-Naracoorte), las Islas Heard y McDonald, la Isla Macquarie, y en el año 2000, la región de las Montañas Azules, que desgraciadamente sufrió varios incendios devastadores a finales del año 2001.
Por si esto fuera poco, Australia cuenta con 2.000 Parques Nacionales y Reservas.
Ya os he hablado bastante de la fauna, pero la flora no se queda atrás en cuanto a su originalidad; la flora no es mi fuerte, pero no dejo de sorprenderme con las extrañas y gigantescas proporciones de árboles y plantas. Si quieres visitar una base de datos con miles de especies autóctonas y endémicas de Australia, haz click aquí.
La flora australiana comprende unas 22.000 especies. Más del 90% son autóctonas, y muchas de ellas endémicas, es decir, que no se encuentran más que en este lugar.
La vegetación, predominantemente perenne, varía desde la densa población de arbustos y bosques de eucalipto en la costa, hasta la espinosa de mulga y mallee, pasando por los arbustos que crecen sobre los suelos alpinos de las llanuras del interior.
En sus diferentes zonas se encuentran robles, fresnos, cedros, boj y hayas, palmeras, helechos y parra. En los montes de Tasmania se han desarrollado extensos bosques de pinos, que ocupan la segunda posición, después del eucalipto, del que hay más de 300 especies diferentes, en cuanto a especies vegetales.
Pero a pesar de la protección que otorga la denominación de Parque Nacional o Patrimonio de la Humanidad, la flora australiana corre graves peligros; un informe del WRI (World Research Institute), dice que el continente ha perdido más del 80 por ciento de su frontera forestal original, incluidas áreas extensas de bosques ricos en especies únicas en su género.
Por ejemplo, las tres cuartas partes de la selva húmeda tropical australiana han sido eliminada desde finales de los años 1700. Lo que queda de la frontera forestal australiana está circunscrito principalmente a Tasmania, el cabo de York y la región noroccidental. Una de las mayores amenazas son los animales domésticos que pastan allí, así como la intervención para suprimir los incendios en algunas áreas como medio de gestión forestal.
Las consecuencias de la tala indiscriminada en muchas áreas que no son de frontera también representan un serio problema. Las selvas húmedas templadas, que en la actualidad se encuentran muy fragmentadas, todavía están siendo taladas en Tasmania y el sureste de Australia, sirviendo de materia prima para astillas que se exportan al Japón.
Después de haber recorrido media Australia, de este a sur y de sur a oeste, incluyendo Tasmania, con más de 10.000 km por carretera a mis espaldas, ahora me dirijo al norte, a conocer los 2 estados que me faltan por visitar, Queensland y el Territorio del Norte, y disfrutaré varios de los iconos más famosos de Australia, la Gran Barrera de Coral, Kakadu y Uluru (Ayers Rock), y otros menos famosos pero igualmente hermosos como Kings Canyon, Devil Marbles, y las Olgas, en un recorrido de unos 12.000 km. que seguro coloreará de roja tierra mis botas y demás pertenencias, y sobre todo colmará mi alma de la cultura aborigen, que en estas zonas alcanza sus máximos exponentes artísticos y espirituales.
En este enlace podéis ver todas las fotos del viaje de 6 meses en 2002 por Australia y Nueva Zelanda
¡¡ Hasta Pronto !!
Desde Sydney, Australia, marzo 2002
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