Casa de Hermandad de Ginés.

El currículum de Doñana impresiona, ya que es Parque Nacional desde 1969, Reserva de la Biosfera desde 1981, humedal del convenio Ramsar desde 1982, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) desde 1988, Parque Natural de la Junta de Andalucía desde 1989, 4 diplomas europeos a la Gestión y Conservación.

El broche de oro fue el nombramiento como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994.


Los camiones que se usan para la visita

A pesar de eso, se han cometido muchas tropelías en el parque y sus alrededores, como lo demuestra la urbanización de Matalascañas, la crítica situación del lince, que si no se extingue es porque acabarán clonándolo, la tremenda presión ecológica que supone la romería de un millón de personas al Rocío, y toda la basura que dejan los rocieros a su paso, y los crímenes medioambientales, que no se pueden llamar de otra manera, cometidos por empresas como Bolidén.

Esta multinacional sueca se desentendió de la rotura de la presa de de Aznalcóllar, que derramó tres millones de metros cúbicos de agua ácida y casi un millón de metros cúbicos de lodos sobre las riberas de los ríos Agrio y Guadiama, muy cerca del parque, y no sólo no pagó por el delito, sino que cerró sus instalaciones y se fue de España.


El bosque mediterráneo

Es un ecosistema único en toda Europa, por las marismas creadas por el río Guadiamar y la desembocadura del Guadalquivir, que es el último punto donde millones de aves migratorias reposan antes de pasar a África, y su templado clima convence a muchas de ellas para quedarse todo el año.

Según la época del año, se pueden ver hasta 50 especies de aves diferente, como gaviotas, charranes, cormoranes, águilas, perdices, ánades, flamenco, garzas, cigüeñas, etcétera.


El poblado de La Plancha, típico de la zona

Los mamíferos están representados por ciervos, gamos, jabalís, linces, zorros, liebres, conejos, y yeguas, que tienen dueño pero pasan la mayor parte del año en las marismas.

A media hora de Huelva y una hora de Sevilla, Doñana siempre ha estado en el filo de la navaja, rodeada de lugares emblemáticos como la ruta Colombina (La Rábida, Palos de la Frontera, Moguer y Lucena) y Sanlúcar de Barrameda.


Ciervo

El parque cuenta con 5 centros de visitantes, pero el más completo, y de donde salen las visitas guiadas al parque, es el de El Acebuche, en el kilómetro 12 de la carretera de El Rocío a Matalascañas.

Tiene centro de interpretación, sala de exposiciones y proyecciones, tienda y varios senderos desde los que se accede a los distintos miradores de aves que hay sobre las lagunas, con paneles informativos sobre la flora y la fauna que nos encontramos. Estos servicios son gratuitos.


Las dunas móviles

Lo que no es gratuito, pero es muy recomendable, es hacer una visita guiada por el parque, ya sea fluvial desde Sanlúcar, o la que yo hice, en camiones Mercedes todo terreno, que durante unas cuatro horas recorren todos los ecosistemas del parque.

A veces el camión bota como si fuera en una montaña rusa, pero el recorrido vale la pena. Eso sí, mejor que no vayan niños muy pequeños, porque uno que iba en nuestro camión se asustaba con los botes y no paraba de llorar.


Gaviotas en la playa

El camión parte de El Acebuche, y después de un corto recorrido por carretera se ingresa en el Parque por Matalascañas.

A partir de ahí se recorre durante varios kilómetros la playa, donde miles de gaviotas se solazan, y luego se pasa a la zona de cotos donde se ven bastantes venados y gamos.

Se visitan también las marismas, la vera, que es una zona de transición entre las marismas y los cotos, y el lugar para mí más espectacular de todo el parque, el sistema de dunas móviles, que en función de los vientos, va avanzando más o menos rápido engulléndose la vegetación.


El camión por la playa

La visita, muy interesante per se, se vio aderezada además por los jocosos comentarios de nuestro conductor, un andaluz de Sanlúcar que destilaba mucho humor y mala leche con sus opiniones sobre todos los órdenes de la vida.

Habló de política, de la guerra, de El Rocío, de la gestión del parque, de la tragedia del lince, de los “señoritos andaluces”, etcétera.


El centro de visitantes de El Acebuche

Particularmente interesantes fueron sus comentarios sobre los señoritos y los rocieros, bastante críticos.

Sobre Aznar contaba que cuando él iba al parque, hasta las aves escapaban por toda la parafernalia de seguridad que desplazaba: helicópteros, Guardia Civil, patrulleras por el río, y lo comparaba con las visitas de Felipe González, mucho más discretas.


Mirador de aves en El Acebuche

Nos contó que el principal problema del lince era que como los señoritos sevillanos venían a sus fincas del parque con las queridas de turno, corrían mucho con sus Mercedes para que no los vieran con ellas, y que cada dos por tres atropellaban a un pobre lince que se le ocurría cruzar la carretera en ese momento.

Parece que la expresión “ser un lince” está perdiendo categoría.


Mirador de aves en El Acebuche

Francisco, que así se llamaba, representaba a uno de los dos mundos extremos que se dan en Andalucía, por un lado el de los señoritos que van a Madrid en el AVE 2 ó 3 veces por semana usando todo el tiempo sus teléfonos móviles y haciendo negocios y gestiones.

Tienen fincas enormes, a veces con plazas de toros privadas, donde organizan cacerías para sus amigos, rocieros de postín en primera fila y a caballo, personajes destacados de la Semana Santa sevillana y la feria de Abril, siempre presentes en la Maestranza en sus tendidos VIP, pelo engominado y caracolillos por detrás; doy fe de que son así.


Algunas de las aves que podemos ver

El otro mundo es el del jornalero de sol a sol, sin trabajo fijo, yendo de la cosecha de la aceituna o la uva a la de la almendra.

Pobre de solemnidad, de rostro cetrino, pelo duro como la paja, barba donde podrías encender una cerilla, surcos en su piel como los de la dura tierra que labra o manos desolladas por las redes con la que pescan algo que llevarse a la boca.

A uno le puso la Guardia Civil una multa de 500 euros por matar un lagarto protegido para comer, e ingresó en la cárcel porque no pudo pagar la multa.


Parece que no le hacen mucho caso a la señal

Este fue el emigrante andaluz típico de los 60, ya fuera a Europa o a regiones más prósperas como Cataluña, donde trasladaron su cultura, y, por ejemplo, la feria de Abril de Hospitalet de Llobregat ya supera en tamaño a la de Sevilla, o por lo menos eso dicen los andaluces de Hospitalet, aunque todos sabemos que exageran un poco.

Si quieres ver las fotos de Doñana, haz click aquí.

Si quieres ver los enlaces sobre Doñana en patrimonio humanidad, haz click aquí.

Si quieres ver la ruta hecha para llegar de Sevilla a Doñana, visita Vía Michelín.

¡¡ Hasta Pronto !!

Desde Doñana, 23 de Octubre de 2004.