Tocando el Cielo en Ubud y Tocando Fondo en Tulamben
Estatua en el Museo Antonio Blanco de Ubud
Ubud te eleva literalmente a las alturas, ya que está situado en una zona montañosa del interior de Bali, y metafóricamente te eleva también porque es uno de los lugares de la isla donde la espiritualidad se encuentra más presente, ya sea en forma de celebración religiosa o sencillamente por la armonía que desprende el lugar.
Con Ubud también se puede usar la definición que hice para Kuta de conurbación, ya que ha crecido enormemente en los últimos años y lo que ahora se llama Ubud esta formado por cinco municipios diferentes.
Este desparramamiento hace que a pesar de ser uno de los destinos más populares de la isla no tengas la sensación de que está masificado.
Como tiene muchos templos, museos y galerías de arte para visitar, sólo en la zona del mercado central se producen aglomeraciones porque es donde aparcan los autobuses de turistas que vienen a hacer la visita de día.
Estudio en el Museo Antonio Blanco de Ubud
Muy cerca del hotel donde me alojaba, el Alila Ubud, construído en una colina rodeada de terrazas de arroz, se encuentra la casa museo de Antonio Blanco, el pintor español llamado el «Dalí de Bali», al que conocí en 1993. Falleció en 1999 pero su memoria está muy viva en la comunidad.
El museo te recibe con un pórtico que en realidad es la firma más grande del mundo, la del artista, que define bastante su personalidad surrealista, ya que se parece a una persona sentada en posición de loto.
En la terraza del edificio hay varias estatuas doradas de danzarines balineses, en homenaje a la mujer de Antonio Blanco, bailarina profesional y motivo de muchos de sus cuadros.
Ofrenda en un templo
Por los jardines pupulan aves y otros animales exóticos, y hay también un anfiteatro en el que solía bailar su hija Tjempaka.
Su taller permanece como lo dejó al morir, y ahora lo utiliza su hijo Mario, que también es pintor y expresa en su rostro la mezcla de razas y culturas que le transmitieron sus padres.
Muy cerca del museo está la galería de un artista llamado Symon, con un estilo muy personal, como tantos otros artistas extranjeros que han elegido Bali como su hogar.
El templo Taman Ayun
Desde Ubud se pueden hacer excursiones muy interesantes a la zona de montaña, con trekkings a los 2 volcanes de la isla, el Batur y el Agung, pero ya había completado mi cuota de volcanes con los de Java y Lombok y preferí visitar varios templos y el lago Bratan en Bedugul, que tiene un hermoso templo en sus orillas.
Visité también la zona más bonita de terrazas de arroz, cerca de Bedugul.
En Bali pueden llegar a tener hasta 3 cosechas de arroz al año, pero durante mi visita era el momento de transición entre 2 de las cosechas, y estaba todo amarillento y lleno de humaredas porque estaban quemando los restos de la cosecha anterior y preparando los campos para la siguiente.
El templo del lago Bratan
El templo más espectacular de Bali es sin duda el Tanah Lot, que con la marea alta queda aislado, mientras que con la marea baja se puede visitar, pero sólo por balineses, los extranjeros tienen vedado el acceso.
Las olas golpean con ímpetu contra las rocas que protegen el templo, dejando un manto de espuma blanca que aún hace más hermoso el entorno.
Hay una pequeña cueva en la que la gente hace cola para entrar y ver la serpiente sagrada que protege al templo y sus sacerdotes.
El templo Tanah Lot
Es el lugar perfecto para ver el atardecer, ya que hay varias terrazas desde las que se ve el sol descender con el templo en primer plano.
Otro templo interesante es el de Batukaru, uno de los seis templos axiales de la isla.
Uno de los templos más venerados es el de Taman Ayun, el templo Real de Mengwi, construído em el siglo XVII, que tiene varias estupas y patios sagrados.
Flores
El día lo terminé con una visita al bosque de monos Alas Kedaton, donde tienes que cuidar todas tus pertenencias porque al menor descuido te puedes quedar sin gorra, botella de agua, o lo que es peor, sin cámara. Sobre los árboles se ven sobrevolar gigantescos murciélagos.
Era luna llena y eso en Bali significa festival religioso, ya que utilizan hasta 3 calendarios, y al menos 2 de ellos son lunares, el hinduista con 15 meses que coinciden con las cosechas de arroz.
Terrazas de arroz
De Ubud me fui a Tulamben, en la costa este de Bali, y el lugar perfecto para pasar los últimos días de mis seis meses de viaje. Un lugar tranquilo y relajado, aunque en esos días estaba bastante movido por el mundial de fútbol.
La principal razón de ir a Tulamben es que a sólo 50 metros de la playa se encuentra el pecio del US Liberty, un carguero de 120 metros de eslora hundido por los japoneses en 1942.
Terrazas de arroz
La profundidad a que está hundido varía desde los 12 hasta los 28 metros, y eso lo hace apto tanto para buceadores noveles como experimentados.
Después de 60 años, se ha convertido en hogar de múltiples especies de peces, anémonas y todo tipo de vida submarina. Cada vez que buceaba en él encontraba algo nuevo.
Las inmersiones se hacen desde la playa, a donde vas vestido de hombre rana desde los centros de buceo, pero las botellas las llevan mujeres sobre su cabeza hasta la playa a cambio de unas rupias.
Buceo en Tulamben
Estuve buceando con una de las mejores escuelas de buceo, Tulamben wreck divers, cuyo dueño, Tony, es un australiano que cumplía 40 años de matrimonio con el buceo y 30 con su mujer el día que le conocí.
Había dejado un rentable centro de buceo en la costa oeste de Australia, especializado en buceo con tiburones ballena, por, en palabras textuales, «la paz y felicidad de Bali».
El centro de buceo Tulamben Wreck Divers
El centro de buceo cuenta también con un hotel muy agradable, con piscina para formar a los buceadores, y un hostal de mochileros para los que prefieren gastar su presupuesto buceando más que en alojamiento.
Además del US Liberty, hay varios lugares más de gran calidad para bucear, como el coral garden y the wall, el primero un auténtico jardín sembrado de corales y vida animal, donde me reencontré con los primos acuáticos del caracol, los nudibranquios.
El hotel Mimpi Resort
The Wall o El Muro es una pared vertical de gran belleza en la que los corales abanico y otras especies se mueven al compás de las corrientes marinas.
El hotel donde me alojé, el Mimpi Resort, tenía una de esas piscinas sin borde que dan una impresión de continuidad con el mar.
De camino al aeropuerto de Kuta paramos en el Templo del Agua Tirta Gangga, que significa Agua sagrada del Ganges, construído por la familia real Karang Asem en 1948, y reconstruído en 1963 después de una erupción del volcán Agung.
Para ver la panorámica Olympus de Tinti Gangga en Bali, haz clic aquí.
Estatuta en Tirta Gangga
El templo es muy hermoso aunque estaba bastante sucio el día que lo visité. Tiene varios pequeños lagos llenos de estatuas hinduistas y muchas fuentes que me recordaron algo a La Alhambra.
También hay una enorme piscina que son baños públicos para los balineses.
Con la mirada impregnada de la belleza del Templo del Agua y el corazón henchido por las sensaciones, emociones y experiencias acumuladas en mi último mes de viaje en Bali, llegué al aeropuerto dispuesto a emprender un largo viaje de retorno a casa, aunque mi alma me dice que tengo un nuevo hogar en una bella isla de Indonesia que me ha dado todo sin pedirme nada a cambio.
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